Muchas veces cuando alguien nos hace la pregunta, "Como estas?", nosotras somos rápidas para contestar, "Estoy bien ocupada." Tomamos la respuesta como si fuera una medalla de honor y con orgullo empezamos a describir todas las actividades que producen tal ocupación. Nosotras las mujeres somos notorias en estar ocupadas todo el tiempo. Es muy raro cuando tu y yo tomamos tiempo durante nuestro día para descansar.
Nos convertimos en "robots" que están en movimiento todo el día.
Nosotras no somos maquinas. Somos seres humanos con emociones, pensamientos y cuerpos físicos que necesitan descanso. Si nosotras no aprendemos a balancear nuestras vidas quitando actividades que no son productivas nos vamos a enfermar del estrés y del afán Uno puede estar ocupada pero no productiva. Hay una diferencia muy grande entre estar ocupada y ser productiva.
La diferencia es que estar atareado termina en frustración sin frutos y ser productivo termina en la realización del sueño que Dios ha puesto en tu corazón. Es importante tomar un inventario de tus actividades para ver cuales te están conduciendo al estrés y cuales a la paz de Dios. Hay que eliminar las que están produciendo estrés para vivir una vida saludable y balanceada.
Algo es seguro: Cuando Dios nos llama a hacer algo El nos da la gracia que necesitamos para cumplirlo por mas difícil que pueda ser la tarea. Apoyate de Su gracia y elimina las actividades que no producen buen fruto en tu vida.